Cuchillo calcolítico 1

Réplica en resina de cuchillo calcolítico - abrecartas
Pequeño cuchillo elaborado completamente en resina (hojita y mango), inspirado en modelos del neolítico final e inicios del calcolítico del grupo de Auvernier-La Saunerie (Saône-Rhône, Francia), donde apareció un pequeño cuchillo con el mango elaborado en asta de ciervo y la hoja bifacial enmangada con brea de abedul. Cerca de 16 cm de longitud.

1 Paleolítico
Tal y como los conocemos hoy en día (una hoja afilada sobre lámina insertada en un mango), aparecen fundamentalmente a partir del neolítico y el calcolítico. Con anterioridad y desde el paleolítico inferior, cualquier lasca o lámina con filos cortantes podría haber cumplido esta sencilla función de corte. F. Bordes definió por primera vez en su famosa tipología lítica el "cuchillo de dorso", una simple lasca que presentaba un filo cortante opuesto a una zona acondicionada por retoque (cuchillo de dorso abatido) o por córtex natural (cuchillo de dorso natural). Este tipo de cuchillos se encuentran igualmente en el paleolítico medio (con una variante regional de cuchillos de dorso bifaciales o Keilmesser en Europa central), y sobre lámina desde el Chatelperroniense y en el Paleolítico Superior (láminas de dorso abatido). Tantos los cuchillos (o puntas) de Chatelperrón, como las láminas de dorso abatido, fueron seguramente enmangados.
2 Neolítico se siguen utilizando la mismas herramientas con enmangues sencillos y adhesivos (un ejemplo de enmangue corto para pequeñas láminas es el del yacimiento lacustre de Montilier en Suiza).
Es hacia finales del período cuando añadimos al repertorio lítico los puñales (así denominados no tanto por su funcionalidad como por su morfología), que pueden estar exentos o con mangos elaborados en madera, asta, resina, fibras vegetales o una mezcla de ambas.

Son célebres los puñales elaborados en láminas procedentes de los talleres líticos del Grand Pressigny francés, una zona que durante buena parte del neolítico "exportará" miles de grandes láminas por toda Europa desde Francia hasta Holanda (NéolithiqueBlog). Algunos ejemplos son los puñales de Charavines, Portalban, Salisons, La Gare à Puy-de-Serre y Mervent, Ferrusac, puñal de Chalaine, L'Oise, los procedentes de estaciones lacustres suizas, Puiseaux, etc.
Estos cuchillos se encuentran generalmente asociados a contextos domésticos con diferentes grados de abandono y reciclado (de forma que en ocasiones su morfología inicial es prácticamente irreconocible), y con huellas de uso relacionadas con el corte de cereal, el desgranado de las espigas, el corte de carne o el raspado de pieles (BSPF, 99, 2002)
En cualquier caso, la rareza de este tipo de objetos no justifica su importación para tareas domésticas. Todo hace pensar que estos cuchillos en particular tuvieron inicialmente una función simbólica vinculada a la esfera masculina (Arkeotek).

3 Los últimos puñales de sílex
Los puñales se siguen elaborando en el calcolítico (puñal de Otzi, el fantástico ejemplar de Montelírio (Valencina de la Concepción), fabricado en cristal de roca con enmangue de marfil (European Journal of Archaeology 2013), o los cuchillos del predinástico egipcio (ver reconstrucción), etc.

Con la aparición del metal (primero el cobre y después el bronce), los puñales de sílex irán desapareciendo paulatinamente, no sin antes asistir a la fabricación de piezas que imitan a sus homólogos en metal. Ya desde finales de neolítico, encontramos las primeras imitaciones en sílex de cuchillos metálicos (el ejemplo de Charavines, es considerado como una imitación del puñal metálico de  Saint Blaise), práctica que se prolongará hasta comienzos de la Edad del Bronce con las dagas danesas del norte de Europa.

© Paleomanias